Baila conmigo

 

A mediados de los años 90, Chayanne (el papá de todos) protagoniza la película Dance with me (Baila Conmigo), de la directora Randa Haines.  Ahí vemos a Chayanne como el protagonista de la historia, en la cual se narra la historia de un joven cubano que viaja a Estados Unidos para conocer al hombre que cree que es su padre, y en el camino, obvio, se enamora de la guapísima Ruby Sinclair (Vanessa Williams).

Por supuesto, en la película hay muchísimo baile, justificado por la nacionalidad cubana de Rafael Infante (Chayanne) y el hecho de que su padre-no padre John Burnett (Kris Kristofferson) es dueño de un estudio de baile donde practican profesionales y reciben clases los amateurs.

Las diferencias entre los personajes y sus culturas, se exploran a través del baile. Mientras que los gringos bailan con mucho cuidado de la técnica y limpieza de movimientos, siguiendo reglas, Rafael baila como le nace en el cuerpo, sin cuidado y sin preocupación. 

La historia es sencilla, tierna y las escenas de baile muy bien logradas. La química entre Ruby y Rafael es evidente, y los personajes secundarios son entrañables. 

La figura del latín lover, desarrollada para Rafael tiene las características de: seductor, buen amante, baila bien y es muy, muy, muy sexy. Básicamente, reducidos a su poder sexual y sensual.

Al final, de la historia triunfa el amor entre Rubí y Rafael pues ambos luchan por sus sueños que son realizarse en el baile en la categoría que eligieron y cada uno logra estar bien con su familia.